La fuerza de la visualización.

En los años ochenta del pasado siglo, el Dr. Dennis Waitley adeptó del programa Apolo un programa de visualización muy interesante. Él invitó a los atletas de los juegos olímpicos a que se imaginaran en situaciones de competición y que actuaran mentalmente con precisión. Para poder valorar mejor la investigación, los concursantes fueron conectados a aparatos de biofeedback. Lo sorprendente fue que, si bien los participantes de este experimento sólo actuaban en la competición con el pensamiento, sus músculos la percibieron como verdadera y mostraron todas la reacciones como si la competición estuviera ya en marcha. La actividad muscular era idéntica.

Hoy en día muchos deportistas de elite aprovechan este conocimiento sobre las neuronas espejo. A esto se le llama “entrenamiento mental”. Mucho antes de que empiece la verdadera competición, los deportistas repasan una y otra vez en su mente todos los movimientos necesarios hasta que éstos se convierten en una segunda naturaleza. Visualizan y recapitulan determinadas experiencias, pero sólo mentalmente. Gracias a las neuronas espejo, los movimientos en el momento en que se lleva a cabo la competición se ponen a disposición en fracciones de segundos. Sucede entonces como si la competición se hubiera realizado en muchas ocasiones, como si ya se hubiera competido miles de veces y se dispusiera de mucha más experiencia, posibilidades de reacción y previsión.

De acuerdo con este principio, cada vez más vemos a deportistas que visualizan la competición. Los corredores de los 100 metros están en el punto de arranque y en su mente están plenamente en la competición. Su cuerpo lo repasa todo, se prepara con cada célula para la competición y puede en cualquier momento repetirla. Pero sobre todo el cuerpo está listo al cien por cien a entrar en la acción que el deportista ha pensado.

Cuando se pregunta a deportistas de elite cómo han hecho para motivarse por un largo espacio de tiempo y tener la capacidad de convocar siempre una fuerza, que no se les había conocido antes, muy a menudo dicen lo mismo: sólo se han concentrado en el objetivo que habían de alcanzar. La alegría anticipada por conseguir este objetivo era ya tan intensa que todos los demás pasos parecían pequeños e insignificantes. Estaban, pues, unidos con el objetivo y la alegría de la victoria.

Debemos construir el campo de resonancia de la “victoria”

Cuando más interesante nos instalemos en el objetivo deseado, cuanto más intensamente analicemos la “victoria” y la hagamos pasar ante nuestros ojos del espíritu, tanto más perfecto será el campo de resonancia que desarrollemos, que emitamos y que otros reciban. De esta manera encerraremos en nuestra vida todo aquello que nos ayudará a alcanzar nuestros objetivo. Además, todo nuestro cuerpo se situará en el acontecimiento deseado.

De hecho, hoy se sabe que podemos crear en nuestro cerebro una especie de “biblioteca de enlaces neuronales”, cuando ponemos en marcha de esta manera nuestra capacidad de imaginación.

Desde esta óptima, podemos comprender el modo de funcionar más profundo de las visualizaciones. Cuando consideramos de manera consciente, y con la ayuda de la imaginación, las situaciones deseadas, optimizamos nuestro campo de resonancia y reforzamos nuestras convicciones. Más allá de esto activamos nuestras neuronas espejo y disponemos en el momento adecuado de mucho más conocimiento. Para nuestro cerebro esto es, de hecho, como si con este tipo de situaciones hubiéramos almacenado suficiente experiencia para poder hacer las cosas necesarias en el momento adecuado, impresionándonos a nosotros mismos y a nuestro entorno por la seguridad, la tranquilidad y el conocimiento que manifestamos. Nuestro cuerpo se siente alivido y en ningún momento sorprendido o coaccionado.

Desde hace tiempo tengo la costumbre de repasar mentalmente los encuentros o los plazos que son importantes para mí y de imaginarte la solución deseada. De esta manera, me siento siempre seguro y dueño de la situación, y siempre sé cómo reaccionar rápidamente, y determinar sin dificultad lo que sucederá.

Las neuronas espejo son responsables también de algo más que es fundamental. Nos regalan otro modo de recordar, que todos nosotros ya en una ocasión habíamos percibido.

Quizá recuerdes la sensación que has tenido al saber que otras personas partiendo de cero han alcanzado la riqueza o el prestigio. Tal vez entonces durante algún tiempo te sentiste muy estimulado y motivado, y creíste que tú también podías hacerlo. Tal vez también en este caso son responsables la neuronas espejo. Almacenan como tuyas las experiencias de otras personas de las que has oído hablar o has leído, y que tú admiras mucho.

Se ha observado que, cuanto más se identifica una persona con alguien y cuanto más similar sea el anhelo común, tanto más intensa es la explicación almacenara.

Esto nos proporciona nuevas posibilidades de solución que hasta ahora no teníamos. Ejemplos como Gandhi, Buda, Jesús, Martin Luther King, la Madre Teresa, Nelson Mandela y otras personalidades modélicas fueron y son tan importantes para nuestro desarrollo porque inspiran conciencia y nos conducen por nuevos derroteros. Justamente, lo mismo pasa cuando leemos o escuchamos historias de deseos de otras personas que han tenido éxito. Nuestras neuronas espejo nos ayudan a imitar interiormente lo que vemos o escuchamos hasta que se convierte en realidad para nosotros. Por eso nos son de ayuda las historias de éxito fuera de nuestros límites, porque sabemos que nosotros mismos las podemos realizar.

Nuestras neuronas espejo se activan
cuando nos ocupamos de ello activamente,
lo mismo que otros han realizado cosas
aparentemente imposibles.


-Busca la experiencia de cómo otros han conseguido lo que tú siempre quisiste conseguir. Léelo, visualízalo, analízalo, haz tuya la experiencia de los demás.

Leí en un estudio que las lecturas predilectas de personas extremadamente afortunadas son las biografías de personas también afortunadas. Con el conocimiento que tenemos ahora de la capacidad de aprendizaje de las neuronas espejo, esto ya no nos sorprende. Cuanto más leamos de personas afortunadas, tanto más recuerdo propio almacenaremos en nuestro cerebro.

Sabemos ahora que todo es posible. Ya no hay límites. Los pretendidos impedimentos son sólo vallas para dar saltos todavía más altos.

-Ocúpate de la vida de los hombres de éxito.
-Lee biografias o mira películas que describan esas vidas.
-Ocúpate de las historias de personas que han pasado de las estrecheces económicas al éxito financiero.
-Ocúpate de los llamados “milagros”.

3 Responses
  1. L. Says:

    Todo ejemplo sirve como ejemplo.
    Me encanta la última frase

    Besos


  2. Hola Georg,serias tan amable de decirme cual es el enlace antiguo para poder modificarlo?

    Un saludo!!


  3. G. Mc Straw Says:

    Oh! Vaya, pues el antiguo era el del blog que me eliminaron: Trans (music) lation http://transmusiclation.blogspot.com y ahora he registrado el dominio propio.

    Gracias y disculpa que no lo citara en el anterior comentario :)



EL METODO SILVA DE CONTROL MENTAL


Visualizar: El metodo silva para aprovechar la capacidad de la mente